La estrategia de Luis Bernardo Nava de “trabajo mata grilla”, frente a la proliferación de bardas y espectaculares de otros aspirantes. Asegura que no le teme a la desventaja y que los resultados de su trabajo lo posicionan.
SAN JUAN DEL RÍO, QRO., 22 octubre 2025.- Frente a un escenario político anticipado en el estado y visiblemente saturado de pintas, lonas y espectaculares con nombres y rostros de aspirantes, el Secretario de Desarrollo Social, Luis Bernardo Nava Guerrero, ha trazado una línea de batalla clara y frontal: la de los resultados contra la de la imagen.
“Sin duda nosotros vamos a continuar haciendo nuestro trabajo concentrados en nuestra chamba”, afirmó el posible aspirante a la gubernatura. Su definición estratégica se resumió en la frase que promete marcar su campaña: “Yo siempre lo he dicho, trabajo mata grilla y trabajo mata bardas, mata espectaculares”.
Esta declaración es una alusión directa a las estrategias de sus correligionarios panistas. Nava contrapuso la imagen que se quiere presentar con lo que sucede en la tierra, en el campo, con la gente, posicionándose como el funcionario del trabajo de campo sobre el marketing político.
Al ser cuestionado sobre si esta decisión de no participar en la “guerra” de bardas lo pone en desventaja, Nava reveló que su métrica es otra: los estudios de opinión. “Mientras nos posicionemos bien y mejor”, afirmó, “quiere decir que tampoco es tanto ni la desventaja ni el impacto relativo de esas otras estrategias”.
Nava consideró que la promoción personal tuviera algún posible efecto negativo en el partido. Al preguntarle si estas acciones menoscaban al PAN, respondió: “Pues lo bueno es que no usan el logo del partido”. Con esto, Nava sugiere que son esfuerzos de carácter personal que él respeta, pero que no representan necesariamente al partido.
El secretario insistió en que su foco es dar resultados que la gente espera y mide. Confirmó que se mantendrá concentrado en su trabajo y que, si bien en su momento y “con todas las de la ley” se hará difusión, por ahora no lo considera. Esta postura busca proyectar una imagen de seriedad y enfoque en la función pública, en contraste con un proselitismo de otros funcionarios y que muchos ciudadanos ven como muy adelantado.